"La emergencia es algo vivo, dinámico y transversal, formada por familias, no por números ni estadísticas"

La emergencia habitacional no se reduce a simples cifras, son familias y representa la paz social. Así lo expresó Carolina Amaya, directora del Instituto de Vivienda y Hábitat (IVH) del municipio, al remarcar que la emergencia habitacional no finaliza con el vencimiento de una ordenanza.

Según sus palabras, la emergencia es algo vivo, dinámico y transversal, formada por familias, no por números ni estadísticas.  Sus declaraciones tuvieron lugar tras una sesión del Concejo Deliberante que aprobó una nueva normativa de emergencia habitacional, aunque dejó fuera un artículo considerado esencial para atender las necesidades económicas más urgentes.

Amaya lamentó que algunos artículos clave propuestos en relación con la eficiencia en el uso de recursos para atender la emergencia no fueran incluidos. No obstante, destacó que la nueva declaración de emergencia, que estará vigente por tres años, abre ciertas herramientas para absorber la creciente demanda habitacional. Sin embargo, señaló que dichas herramientas quedaron limitadas respecto a la propuesta inicial planteada por el Ejecutivo.  

Amaya también subrayó que, al momento de esta declaración de emergencia, en San Martín de los Andes hay 3048 familias registradas en el Registro de Demanda Habitacional. Frente a este panorama, destacó la ausencia de apoyo por parte del Estado nacional y mencionó que la Provincia está implementando nuevos métodos tanto para medir la demanda como para ofrecer soluciones habitacionales propuestas.