EPAS normalizó el funcionamiento de un pozo de cloacas en Junín de los Andes

El Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) informó que el domingo normalizó el funcionamiento del pozo de bombeo de la localidad, ubicado en las calles Epulafquen y Ruta Nacional 40. Los operarios trabajaron en horas de la mañana, cuando los caudales de efluentes son mínimos, para destapar el sistema que estaba obstruido por elementos indebidos.
El sistema había tenido una merma en su capacidad, debido a la obstrucción de una bomba, provocada por el ingreso de material indebido arrojado a las redes. Los trapos, escombros y otro tipo de objetos, generan que los impulsores de las bombas dejen de funcionar (trabándose), muchas veces provocan que los artefactos se quemen y dejen de funcionar.
La semana pasada, en la localidad de Junín de los Andes, se han repetido incidentes en las plantas depuradoras de la ciudad (a través del sistema cloacal), por la llegada de desechos que ponen en peligro el funcionamiento del propio sistema y la seguridad de sus operarios.
En reiteradas ocasiones se han tenido que remover elementos como: bolsas de consorcio con restos de poda y trapos. El arribo de todo este material indebido a la planta, no sólo provoca roturas en las cañerías y cámaras, sino que también impacta contra las primeras barreras de la depuración que son las rejas. En ese lugar los operarios de EPAS deben retirarlas usando herramientas de porte o sistemas de izaje, que también han resultado dañados.
Para poder intervenir en algunas situaciones, es imprescindible detener los procesos, lo que implica dejar de depurar por unas horas y perder los ajustes que tiene para la operación continua y que llevan tiempo lograrlos, lo que en definitiva implica mayor desgaste de equipos, de uso de insumos, y de horas hombre de operación. El principal inconveniente es que existen elementos de menor porte que pasan esas rejas de contención, provocando daños al equipamiento electromecánico instalado.
El Gerente General de Servicios del Interior, Juan Vassallo, señaló: “la llegada de este material indebido, más allá de impactar en el ingreso de la planta y causar daños y pérdidas económicas, afecta todo el sistema cloacal, poniéndolo en peligro de colapso y produciendo desbordes y taponamientos que impactan en la red y perjudican a los usuarios”.
Todas estas situaciones podrían evitarse si tanto pequeños, medianos como grandes usuarios utilizaran el sistema cloacal correctamente:
Evitando desechar elementos sólidos que perturben el funcionamiento de las instalaciones.
• No arrojando trapos, pañales, algodones, bolsas, preservativos; envases plásticos en general o de cartón; productos solidificados como aceites, lubricantes y pinturas; materiales no biodegradables a corto plazo como maderas y cartones; colillas de cigarrillos; medicamentos vencidos.
No conectar el sistema de desagote pluvial a la red cloacal.
Recordamos que las conexiones están diseñadas y construidas para permitir solamente el paso de líquidos o disposiciones excretas. Los productos de origen industrial generan ácido, dañan gravemente las cañerías y sacan de régimen las plantas de tratamiento de líquidos cloacales.
El correcto funcionamiento de la red cloacal requiere tanto del mantenimiento y la atención de la empresa como del compromiso de los usuarios cuidando la red.